SOMOS pequeñas partículas
de polvo y vientoagonizando a cada instante.
Nacemos con la lluvia.
Nos vamos con el vientoy volvemos mucho más lejos
otra vez para tejer otra historia,
otro lienzo imperfecto.
Como abejas buscamos la miel
dejándonos las alas,sucesivos arañazos,
vuelos en combate
alentando el espíritu.
Cuando comprendamos
el bello sentido de la vida,dejaremos de libar
el néctar de las flores.
Seremos por fin dioses
de otro crepúsculo.
Del Poemario El latido de la vida, Parnass, 2016